Con motivo de la llegada del verano (siempre hay que buscar alguna excusa para viajar) decidimos irnos un fin de semana a Como, una pequeña ciudad en la región de Lombardía, al norte de Italia y justo en la frontera de Suiza.

Hicimos una pequeña escala en el cantón italiano, concretamente en Lugano.

Nuestra idea era ir a Bellinzona, a ver una obra de un arquitecto suizo y profesor de la EPFL llamado Luca Ortelli. Por una serie de motivos, pasamos de Bellinzona y fuimos directamente a Lugano. Era la primera vez que iba al cantón italiano. Es una parte de Suiza peculiar, no parece Suiza, ni Italia. Es una extraña mezcla.

La ciudad en sí no es gran cosa. Eso sí, está al lado de un lago y eso le permite tener unas vistas maravillosas, grandes montañas.. Naturaleza mágica.

El caso es que no tuvimos mucha suerte para la cena. Pensamos que ya nos encontrábamos más cerca de Italia que de Suiza, y craso error… Los precios seguían siendo suizos (17CHF/14€ por dos litros de agua) y la comida un sucedáneo de la rica comida italiana.

Después de una fallida fuimos al albergue que estaba vigilado por una suiza-alemana más antipática que creyó que queríamos fiesta y casi nos echa del albergue, por hacerle una serie de preguntas.

Muy por la mañana llegamos a Como y por fin nos encontramos con ese “arte de vivir” que tanto falta en la puntual Suiza. Esa vida por las calles, la gente, las terrazas… El dolce far niente.

De Como podría decir muchas cosas, pero ahora me voy a centrar en la arquitectura racionalista.
Esta pequeña ciudad al borde un precioso lago acogió al arquitecto Giuseppe Terragni.

Este arquitecto, que murió muy joven (con 39 años) trabajó principalmente bajo el régimen fascista (su hermano era un pez gordo en Como, por eso pudo construir tanto) y fue el pionero de la arquitectura racionalista italiana.

Nosotros cogimos además una guía turistica y teniamos el tour de “Como, city of Razionalism” así que fuimos por varias obras. Una delicia. (Para más información www.comotourism.it)

En principio íbamos a entrar en la casa del Fascio hoy en día sede de “Guarda di Finanza” que se reúnen una vez al año. Evidentemente ese día fue el día que nosotros estábamos en Como y como habían encerado el suelo, no nos dejaron entrar.

Fue construida entre 1932 y 1936. Este proyecto sería la sede local del partido fascista. Mussolini quería que fuera un edificio transparente, para el pueblo. Razón por la que, por ejemplo, desde la última loggia se puede ver el paisaje.

Además, las fachadas tienen grandes huecos; cada una diferente dependiendo de la incidencia solar. Es un paralelepípedo perfecto, cuya altura es de 33m, proporcionando un semi cubo. Las 16 puertas de vidrio (transparencia pueblo-gobierno) se abrían de manera simultánea apretando un botón. De esta manera los soldados no tenían que romper filas al entrar al edificio.

Además, se produce un reflejo de la ciudad en las puertas, para seguir ese diálogo que Terragni tenía muy presente en cada detalle.

Muchas más cosas nos contó, pero os dejo que las descubráis cuando vayáis a Como.

Visitamos también el edificio de Novocomun, otra obra de Terragni construyó con tan sólo 23 años. (vamos, a mi humilde edad).

Terragni no enseñó el proyecto y nadie vio cual fue el resultado final hasta que los andamios fueron quitados. Todo la presa nacional se puso en su contra, creo recordar que hasta querían destruirlo, pero finalmente dos grandes revistas de arquitectura se pusieron de su lado y la casa se quedó (Domus y otra que no recuerdo).

Este revolucionario edificio que abandona la tradición arquitectónica italiana, moviendo así hacia el modernismo francés y alemán. A pesar de eso, Terragni no se limita a copiar, y tiene su propio lenguaje.

Aquí he encontrado un PDF bastante interesante.

Es conocido por el “trasatlántico” por esta vista.

Creo que la vuelta a Lausanne me ha hecho olvidar todo aquello que nos contaron, por eso no me explayo más. De todas maneras es una visita recomendada. No sólo por la arquitectura racionalista; Como tiene un emplazamiento privilegiado.